THE SHOW MUST GO ON

Julio de 1998. Afueras de un poblado llamado Drumnadrochit. Ahí se encuentra el Lago Ness, uno de los paisajes más hermosos que he visto nunca. Fue también el punto medio del Interrail. Ese viaje que hice gracias a ti, y que me marcó para siempre. Fue esa la época en la que mejor tuve la ocasión de conocerte, a ti y a tus amigos.

Ahora ya no estás, pero yo siempre te recordaré, recordaré como eras, la pasión que tenías por vivir, como planeabamos viajes cada vez que nos encontrabamos, y como siempre conseguías arrancarle una sonrisa a cualquiera. Intento hacer lo que pedías en tu diario, que te recordaramos por como eras, y que estuvieramos alegres, aunque es difícil. Yo te echaré mucho de menos, aunque sólo sea porque dejaré de encontrarme contigo en la Morea, y porque dejaré de escuchar tus aventuras. Esos eran momentos que merecían la pena vivirlos, y que me hacían querer ser un poco más como tú eras.

Ahora que eres transmaterial podrás viajar por todos los rincones del mundo. Revisitar aquellos en los que tan buenos momentos viviste, y conocer los que te faltaron por visitar. Espero que, de algún modo, tu transmaterialidad te permita leer estas líneas, y recibir mi eterna gratitud por el regalo de haberte conocido. Ahora lamento no haberte aprovechado más. Tus cenizas estarán ya en el Cantábrico, pero tu recuerdo siempre permanecerá en mi, y en toda la gente que te quería.

Al igual que hizo tu mejor amigo el dia de tu funeral, yo sólo puedo resumir lo que siento en una palabra.

Gracias.

1 comentario

[theinvisiblegirl - 01 de marzo de 2006 - 15:51]

Creo que todos queríamos ser un poco como él y para todos fue un regalo haberle conocido.
Lo mejor de todo es que cuando me acuerdo de él, a pesar de todo, no puedo evitar sonreír porque él siempre estaba sonriendo y contando mil aventuras.
Mucho ánimo.
Un abrazo.