PESADILLA ANTES DE ENCONTRAR UN CURRO DECENTE (1)
Hace mas o menos un año realice una entrevista de trabajo y, al poco, me llamaron para decirme que me cogian. El 11 de Noviembre de 2003 fue mi primer dia trabajando en mi empresa, como becario. Yo estaba muy ilusionado. Era mi primer trabajo serio, iba a cobrar dinero por ello, iba a trabajar en algo que me gusta, me iba a servir como horas practicas para mi master y ademas habia tardado no mas de dos meses en encontrarlo tras terminar la carrera. Como no iba a estar contento.
Once meses despues, ya no estoy tan contento. Al contrario. Odio este sitio. Las cosas empezaron a ir mal desde el principio. La primera cosa de la que voy a hablar hoy es del lugar en si. La empresa en la que trabajo es... una tienda de ordenadores. Detras del espacio para atender al publico esta el taller donde se reparan los ordenadores, al fondo hay, a la izquierda, un pequeño cuarto de baño y, a la derecha, una angosta escalera que lleva hasta la entreplanta donde yo trabajo.
Bueno, entreplanta es ponerla demasiado bien. Se trata de un pequeño zulo que no mide mas de 1.90 de alto. Menos mal que yo sólo mido 1.80, que si no... Solo tengo problemas al pasar debajo de la lampara y debajo de la tuberia de desagüe, pero ya me he aprendido donde estan, y ya no me pego mas coscorrones. Naturalmente, el zulo no tiene ventanas ni salida al exterior, mas que por la pequeña escalera de la que os hablaba. Eso, sumado a los ordenadores funcionando, implica que hace calor, mas calor de lo normal. Pero mi jefe es benevolente, y en verano, despues de dos semanas protestando, conseguí que comprara un ventilador.
Si hay un rey en mi zulo, ese es el desorden. Y la reina es la suciedad. En mi mesa de trabajo encontre todo tipo de cosas. Una vez, mi jefe me pregunto a ver si no habria una regla por ahi, y yo le respondi que si, que seguro que si, y que si queria buscarla adelante. Un dia, despues de muchos meses, me harte y decidi poner orden. Así que me dedique a ordenar mi mesa, apilando los CDs que no eran mios, los diskettes que no eran mios, los papeles, libros y cuadernos que no eran mios y yo no usaba, y fui dejando todas estas cosas en montones. Las cosas que fui encontrando que me parecieron utiles (un sacacorchos, un pegamento, medicinas, cello, bloques de notas, tarjetas de visita, cuchillos de cocina, tijeras, una regla (ya lo decia yo...), pilas, bombillas, grapas, etc...) las fui depositando en sitios que me parecieron adecuados. Las cosas que fui encontrando, pero no me parecieron utiles (bastoncillos para las orejas usados, cubiertos de plastico usados, vasos de plastico usados, platos de plastico con restos de comida, papeles sucios, clinex usados, servilletas de papel usadas, envoltorios de cosas, etc...) las fui tirando. Quisiera recalcar que todo aquello que estaba "usado" no habia sido usado por mi. Despues procedi a eliminar las migas de antaño. La verdad es que consegui que mi sitio de trabajo sea un poco mas agradable, aunque algunas mañanas tenga que rearreglarlo un poco.
Pero con el suelo y el resto del zulo, no me atrevo. Echo una mirada al suelo: papelitos, trozos de carton, grapas, cables, tarjetas de visita, cartuchos de impresora vacios, bolsas de plastico, hojas de calendario, tickets de la compra... Hay una esquina que la llamo la esquina del terror... no me atrevo a remover nada entre las bolsas, las cajas, las papeleras llenas y las botellas de plastico. Vete a saber que sale de ahi dentro. Me gustaria recalcar que yo no he tirado ninguna de esas cosas.
Y luego esta la parte oculta del zulo, esa parte cubierta por una cortina, tras la cual hay una cama, que la ultima vez que le cambiaron las sabanas debe ser... no espera... yo diria que no las han cambiado... nunca... Bueno, ahi, es asomar la cabeza, y te da un mal, asi que no describire esa parte del zulo. Porque este zulo no es solo un sitio donde trabajar, no, tambien es un almacen de cosas inservibles. Como la maqueta del barco, el perchero, las cajas de ordenadores, etc...
Así que aqui es donde he estado metido estos meses.
En el proximo capitulo: "El baño, la basura, y otros habitos de higiene."
Once meses despues, ya no estoy tan contento. Al contrario. Odio este sitio. Las cosas empezaron a ir mal desde el principio. La primera cosa de la que voy a hablar hoy es del lugar en si. La empresa en la que trabajo es... una tienda de ordenadores. Detras del espacio para atender al publico esta el taller donde se reparan los ordenadores, al fondo hay, a la izquierda, un pequeño cuarto de baño y, a la derecha, una angosta escalera que lleva hasta la entreplanta donde yo trabajo.
Bueno, entreplanta es ponerla demasiado bien. Se trata de un pequeño zulo que no mide mas de 1.90 de alto. Menos mal que yo sólo mido 1.80, que si no... Solo tengo problemas al pasar debajo de la lampara y debajo de la tuberia de desagüe, pero ya me he aprendido donde estan, y ya no me pego mas coscorrones. Naturalmente, el zulo no tiene ventanas ni salida al exterior, mas que por la pequeña escalera de la que os hablaba. Eso, sumado a los ordenadores funcionando, implica que hace calor, mas calor de lo normal. Pero mi jefe es benevolente, y en verano, despues de dos semanas protestando, conseguí que comprara un ventilador.
Si hay un rey en mi zulo, ese es el desorden. Y la reina es la suciedad. En mi mesa de trabajo encontre todo tipo de cosas. Una vez, mi jefe me pregunto a ver si no habria una regla por ahi, y yo le respondi que si, que seguro que si, y que si queria buscarla adelante. Un dia, despues de muchos meses, me harte y decidi poner orden. Así que me dedique a ordenar mi mesa, apilando los CDs que no eran mios, los diskettes que no eran mios, los papeles, libros y cuadernos que no eran mios y yo no usaba, y fui dejando todas estas cosas en montones. Las cosas que fui encontrando que me parecieron utiles (un sacacorchos, un pegamento, medicinas, cello, bloques de notas, tarjetas de visita, cuchillos de cocina, tijeras, una regla (ya lo decia yo...), pilas, bombillas, grapas, etc...) las fui depositando en sitios que me parecieron adecuados. Las cosas que fui encontrando, pero no me parecieron utiles (bastoncillos para las orejas usados, cubiertos de plastico usados, vasos de plastico usados, platos de plastico con restos de comida, papeles sucios, clinex usados, servilletas de papel usadas, envoltorios de cosas, etc...) las fui tirando. Quisiera recalcar que todo aquello que estaba "usado" no habia sido usado por mi. Despues procedi a eliminar las migas de antaño. La verdad es que consegui que mi sitio de trabajo sea un poco mas agradable, aunque algunas mañanas tenga que rearreglarlo un poco.
Pero con el suelo y el resto del zulo, no me atrevo. Echo una mirada al suelo: papelitos, trozos de carton, grapas, cables, tarjetas de visita, cartuchos de impresora vacios, bolsas de plastico, hojas de calendario, tickets de la compra... Hay una esquina que la llamo la esquina del terror... no me atrevo a remover nada entre las bolsas, las cajas, las papeleras llenas y las botellas de plastico. Vete a saber que sale de ahi dentro. Me gustaria recalcar que yo no he tirado ninguna de esas cosas.
Y luego esta la parte oculta del zulo, esa parte cubierta por una cortina, tras la cual hay una cama, que la ultima vez que le cambiaron las sabanas debe ser... no espera... yo diria que no las han cambiado... nunca... Bueno, ahi, es asomar la cabeza, y te da un mal, asi que no describire esa parte del zulo. Porque este zulo no es solo un sitio donde trabajar, no, tambien es un almacen de cosas inservibles. Como la maqueta del barco, el perchero, las cajas de ordenadores, etc...
Así que aqui es donde he estado metido estos meses.
En el proximo capitulo: "El baño, la basura, y otros habitos de higiene."
2 comentarios
Anauel -
ace76 -
Espero con ansia los demás episodios. ¿quizás lleguemos a uno titulado: "Nuevas formas de vida en la esquina del terror: demostración prática de la teoría de la generación espontánea".