RIBAVELLOSA
Pues estaba el lunes por La Rioja profunda con un compañero de trabajo (para preservar su identidad, le llamaremos F.), subiendo por una carretera infame camino del repetidor de Cerroyera, entre la nieve, el frio y la niebla (y las vacas, mira que hay vacas en La Rioja), perdidos en el monte, alejados de toda civilización, cuando nos encontramos con algo la mar de extraño.
La carretera llegó hasta una verja abierta, con un cartel que decía "Finca Ribavellosa". La carretera mejoró sorprendentemente, a ambos lados de la carretera empezaron a surgir bancos, y una piscina natural enorme. La carretera siguió subiendo hasta que llegamos a una finca enorme, con tres campos de futbol de hierba a un lado, con miles de campos de baloncesto y con una fila infinita de columpios. Era el hotel de "El Resplandor". Estaba completamente vacío, entre la niebla, enorme, lujoso y terrorífico. F y yo estabamos totalmente perdidos, sorprendidos, y convencidos de que en cualquier momento aparecería Jack Nicholson con su hacha para matarnos a los dos.
Y, en efecto, apareció alguien, pero no era Jack Nicholson, sino tres responsables de la finca, que amablemente nos mostraron como llegar a Cerroyera.
Pasado el momento miedaco, F y yo proseguimos nuestra epopeya riojana.
La carretera llegó hasta una verja abierta, con un cartel que decía "Finca Ribavellosa". La carretera mejoró sorprendentemente, a ambos lados de la carretera empezaron a surgir bancos, y una piscina natural enorme. La carretera siguió subiendo hasta que llegamos a una finca enorme, con tres campos de futbol de hierba a un lado, con miles de campos de baloncesto y con una fila infinita de columpios. Era el hotel de "El Resplandor". Estaba completamente vacío, entre la niebla, enorme, lujoso y terrorífico. F y yo estabamos totalmente perdidos, sorprendidos, y convencidos de que en cualquier momento aparecería Jack Nicholson con su hacha para matarnos a los dos.
Y, en efecto, apareció alguien, pero no era Jack Nicholson, sino tres responsables de la finca, que amablemente nos mostraron como llegar a Cerroyera.
Pasado el momento miedaco, F y yo proseguimos nuestra epopeya riojana.
10 comentarios
mce79 -
Creo que en el último comentario te refieres a oteN, que en efecto quebró, pero tampoco es esa
Ender -
Ender -
mce79 -
Ender -
mce79 -
Ender -
mce79 -
¿En el repetidor? Ibamos a tirar las antenas de Vodafone y Amena. Que no, ibamos a ver si es viable colocarnos ahi y así cubrir esos pueblecillos perdidos.
dee -
ace76 -