DE LA GLORIA AL INFIERNO
Muy felices me las prometía yo a los 20 minutos de la segunda parte. El Madrid perdía, el Barcelona ganaba, y yo estaba en el escenario ideal para vivir esa situación: un bar del centro de Madrid, rodeado de merengues, viendo el partido con uno de mis amigos más madridistas. Ver como los madridistas se iban desquiciando cada vez más, como se veían incapaces de remontar, y como sus caras se desencajaban, era un espectáculo único, digno de ver.
Tan sólo había que aguantar 25 minutos más. Yo no me fiaba nada del Madrid. Ni de sus rebotes culés en el último minuto ni de la flor en el culo de Capello.
Y así fue. Cayó el primero, y apenas cinco minutos después, un cabezazo del penco Diarra fue despejado por el portero mallorquín, rebotó en un defensa, y acabó entrando.
La gloria tornóse infierno. Los madridistas no pararon de corear, "Campeones, campeones", "Nos vamos a la Cibeles", e insultos contra un negro del Barça. La cerveza voló por los aires, las bufandas ondeaban en el aire, y poco más pude ver del partido. Por los gritos supe que el Madrid había metido un tercer gol. Y también por los gritos intuí el final del partido. La ciudad estalló de alegría. Los merengues se dirigieron en tropel a la Cibeles. Un espectáculo digno de ver.
P.D: Tampoco hubiera pasado nada porque dejaran que Raúl subiera a la Cibeles. Total, una vez cada cuatro años, no le va a pasar nada...
5 comentarios
rev -
mce79 -
Aparte de que el Madrid solucionaría su problema con él y por fin se lo quitaría de encima.
mce79 -
Al fin y al cabo, es mi bandera, y me jode que el Madrid la utilice como representación suya! Como si toda España fuera madridista!
Puto Madrid...
dee -
ACE76 -
¿Pero tú querías que ganara el Barça? En fin, como se nota que llevas poco tiempo en la capital, sede del mejor equipo de todos los tiempos.